La santa misa son tres cosas:
- Sacrificio
- Memorial
- Banquete
ETIMOLOGÍA
La palabra misa viene del latín missa (despido), pues al terminar la ceremonia decía, "Ite, missa est", es decir "Vayanse, es el despido", a lo que los fieles contestaban "Deo, gratias". Ademas Misa viene del verbo Mittere, que significa "enviar" y "arrojar".
1.1 Historia
El estudio de la historia de la Santa Misa nos revela su riqueza y hace posible que comprendamos claramente lo que nos ofrece la liturgia, y también cuál es nuestro papel en ella.
LA INSTITUCION DE LA EUCARISTIA
La Misa, frecuentemente
denominada Santa Misa, tanto en la Iglesia Católica Romana como en la Iglesia
Luterana, es el acto litúrgico dentro del cual se ofrece la Eucaristía. De
acuerdo a los Evangelios, la Misa fue instituida por Jesús de Nazareth durante
la Última Cena con sus apóstoles. La diferencia entre ambas iglesias es que
mientras los católicos creen que la transubstanciación ocurre durante el rito
de la consagración del pan y el vino, los luteranos dicen que lo que realmente
ocurre en ese momento es la consubstanciación.
Fue el propio Jesús quien
instituyó el sacrificio eucarístico de su Cuerpo y Sangre durante la Última
Cena como memorial de su muerte y Resurrección, ordenando a sus apóstoles
celebrarla hasta que vuelva, de manera que a través de la Santa Misa se le
reciba a Él mismo como alimento espiritual.
Pero Jesús además quiso confirmar la Eucaristía un día
después de su Resurrección cuando, camino hacia Emaús, encontró a dos de sus
discípulos, Cleofás y otro del que se desconoce el nombre, y accedió a la
invitación de ellos para compartir la cena. Los primeros tiempos
del cristianismo los convertidos se reunían diariamente y escuchaban los
sermones de los apóstoles. En dichas reuniones paulatinamente se fueron
agregando diversos actos en recuerdo de las palabras de Jesús, así como de la
transformación del pan y del vino en el Cuerpo y la Sangre del Señor. Pero
pronto surgieron dos temas que originaron la confrontación entre cristianos y
paganos.
El primero fue la acusación de los paganos contra los
cristianos diciendo que estos practicaban el canibalismo. Esto fue debido a las
palabras de Jesús relacionadas con el rito eucarístico: “Esto es mi cuerpo…
este es el cáliz de mi Sangre… Si no coméis la Carne del Hijo del hombre y no
bebéis su Sangre…” (Juan 6). Los paganos creían que ser cristiano era
participar de unos ritos extraños y secretos, hasta que los apologistas
cristianos de entonces las interpretaron para el pueblo pagano, mostrando así
su significado espiritual.
La otra controversia entre cristianos y paganos surgió
debido a la celebración del Día del Señor. Mientras que los judíos siempre han
mantenido que ese día debe de ser el sábado, en el cristianismo se considera
que el Día del Señor debe ser siempre el domingo, ya que este fue el día de la
Resurrección de Jesús. Por supuesto hay que tener en cuenta que los judíos
nunca han aceptado a Jesús como el Mesías, por lo cual el Señor para ellos es
Yahvé.
Desde tiempos de los primeros cristianos el día domingo ha
sido el día de reunión litúrgica, donde se escucha la Escritura y se oficia la
liturgia de la Sagrada Eucaristía, con el fin de comulgar el Cuerpo y la Sangre
del Señor Jesús.
1.2 Partes
La Misa consta de dos partes, a saber, la Liturgia
de la Palabra y la Liturgia Eucarística. Consta además de algunos ritos que
inician y concluyen la celebración.
RITOS INICIALES
Entrada.- Estando la comunidad reunida, cuando avanza el
sacerdote con el diácono y con los ministros, se da comienzo al canto de
entrada. La finalidad de este canto promover la unión de quienes se están
congregados e introducir su espíritu en el misterio del tiempo litúrgico o de
la festividad.
Saludo.- Cuando llegan al presbiterio, el sacerdote, el
diácono y los ministros saludan al altar con una inclinación profunda. Sin
embargo, como signo de veneración, el sacerdote y el diácono besan el altar; y
el sacerdote, según las circunstancias, inciensa la cruz y el altar. Concluido
el canto de entrada, el sacerdote de pie, en la sede, se signa juntamente con
toda la asamblea con la señal de la cruz; después, por medio del saludo,
expresa a la comunidad reunida la presencia del Señor. Con este saludo y con la
respuesta de la comunidad se manifiesta el misterio de la Iglesia congregada.
Acto penitencial.- Después el sacerdote invita al acto penitencial
que, se lleva a cabo por medio de la fórmula
de la confesión general de toda la comunidad, y se concluye con la absolución
del sacerdote que, no obstante, carece de la eficacia del sacramento de la
Penitencia.
Señor, ten piedad.- Después del acto penitencial, se tiene siempre el Señor,
ten piedad.
Gloria.- El Gloria es un himno antiquísimo y
venerable con el que la Iglesia, congregada en el Espíritu Santo, glorifica a
Dios Padre y glorifica y le suplica al Cordero, se lo puede realizar de en forma de canto o recitada como oración.
Colecta.- En seguida, el sacerdote invita al pueblo a orar, y
todos, juntamente con el sacerdote, guardan un momento de silencio para hacerse
conscientes de que están en la presencia de Dios.
LITURGIA DE
LA PALABRA
Lecturas bíblicas.-Por las lecturas se prepara para los fieles la mesa
de la Palabra de Dios. La lectura del Evangelio constituye la cumbre de la
Liturgia de la Palabra. La Liturgia misma enseña que debe tributársele suma veneración,
sea por parte del ministro delegado o por parte de los fieles.
La primera lectura.- Se toma del Antiguo Testamento.
Salmo Responsorial.- Sigue después de la primera lectura es parte integral
de la Liturgia de la Palabra y en sí mismo tiene gran importancia litúrgica y
pastoral, ya que favorece la meditación de la Palabra de Dios.
La segunda lectura.- Se toma del Nuevo Testamento. Esta segunda
lectura nos sirve para conocer cómo vivían los primeros cristianos y cómo
explicaban a los demás las enseñanzas de Jesús.
El Evangelio.- Se
canta el Aleluya u otro canto determinado por las rúbricas, según lo
pida el tiempo litúrgico. Esta aclamación constituye por sí misma un rito, o
bien un acto, por el que la asamblea de los fieles acoge y saluda al Señor,
quien le hablará en el Evangelio, y en la cual profesa su fe con el canto.
Homilía.-Es necesaria para alimentar la vida cristiana. Es una explicación de algún aspecto de las lecturas de la Sagrada
Escritura, o de otro texto del Ordinario, o Propio de la Misa del día.
Profesión de fe.- El Símbolo o Profesión de Fe, se orienta a que toda
la comunidad reunida responda a la Palabra de Dios anunciada en las lecturas de
la Sagrada Escritura y explicada por la homilía.
Oración universal.- En la oración universal, u oración de los fieles,
el pueblo responde en cierto modo a la Palabra de Dios recibida en la fe y ofrece
súplicas a Dios por la salvación de todos.
LITURGIA
EUCARÍSTICA
Preparación de los dones.- Al comienzo de la Liturgia Eucarística se llevan al
altar los dones que se convertirán en el Cuerpo y en la Sangre de Cristo. En
primer lugar se prepara el altar, y enseguida se traen las ofrendas: el pan y
el vino, que es bueno que sean presentados por los fieles, el sacerdote o el
diácono las reciben en un lugar apropiado y son ellos quienes las llevan al
altar. Depositadas las ofrendas y concluidos los ritos que las acompañan, con
la invitación a orar junto con el sacerdote, y con la oración sobre las
ofrendas.
Plegaria Eucarística.- Es el comienzo del centro y la cumbre de toda la
celebración, que ciertamente es una oración de acción de gracias y de
santificación. La Plegaria Eucarística exige que todos la escuchen con
reverencia y con silencio.
Los principales elementos de que consta la Plegaria
Eucarística pueden distinguirse de esta manera:
a) Acción de gracias en la cual el sacerdote, en
nombre de todo el pueblo santo, glorifica a Dios Padre y le da gracias por toda
la obra de salvación o por algún aspecto particular de ella.
b) Aclamación: con la cual toda la asamblea,
uniéndose a los coros celestiales, canta el Santo.
c) Epíclesis: Por medio de invocaciones especiales,
implora la fuerza del Espíritu Santo para que los dones ofrecidos por los
hombres sean consagrados, es decir, se conviertan en el Cuerpo y en la Sangre
de Cristo, y para que la víctima inmaculada que se va a recibir en la Comunión
sirva para la salvación de quienes van a participar en ella.
d) Narración de la institución y consagración: por
las palabras y por las acciones de Cristo se lleva a cabo el sacrificio que el
mismo Cristo instituyó en la última Cena, cuando ofreció su Cuerpo y su Sangre
bajo las especies de pan y vino, y los dio a los Apóstoles para que comieran y
bebieran, dejándoles el mandato de perpetuar el mismo misterio.
e) Anámnesis: por la cual la Iglesia, al cumplir el
mandato que recibió de Cristo por medio de los Apóstoles, realiza el memorial
del mismo Cristo, renovando principalmente su bienaventurada pasión, su
gloriosa resurrección y su ascensión al cielo.
f) Oblación: En este mismo memorial, la Iglesia,
principalmente la que se encuentra congregada, ofrece al Padre en el Espíritu
Santo la víctima inmaculada. La Iglesia, pretende que los fieles, no sólo
ofrezcan la víctima inmaculada, sino que también aprendan a ofrecerse a sí
mismos, por la mediación de Cristo, en la unidad con Dios y entre ellos, para
que finalmente, Dios sea todo en todos.
g) Intercesiones: por las cuales se expresa que la
Eucaristía se celebra en comunión con toda la Iglesia; y que la oblación se
ofrece por ella misma y por todos sus miembros, llamados a participar de la
redención y de la salvación adquiridas por el Cuerpo y la Sangre de Cristo.
h) Doxología final: por la cual se expresa la
glorificación de Dios, que es afirmada y concluida con la aclamación Amén
del pueblo.
Rito de la comunión
Oración del Señor.- En la Oración del Señor se pide el pan de cada día,
y se implora la purificación de los pecados.
Rito de la paz.- La Iglesia implora la paz y la unidad para sí misma
y para toda la familia humana, y con el que los fieles se expresan la comunión
eclesial y la mutua caridad, antes de la comunión sacramental.
Fracción del Pan.- El sacerdote parte el pan eucarístico, con la
ayuda, si es del caso, del diácono. El gesto de la fracción del Pan realizado
por Cristo en la Última Cena, significa que los fieles siendo muchos, en la
Comunión de un solo Pan de vida, que es Cristo muerto y resucitado para la
salvación del mundo, forman un solo cuerpo.
Comunión.- El sacerdote se prepara para recibir fructuosamente
el Cuerpo y la Sangre de Cristo con una oración en secreto. Los fieles hacen lo
mismo orando en silencio. Después el sacerdote muestra a los fieles el Pan
Eucarístico sobre la patena o sobre el cáliz y los invita al banquete de Cristo.
Luego se realiza el acto de comunión, al recibir por parte de los fieles el Cuerpo
del Señor en las hostias consagradas en esa misma Misa, y en los casos
previstos, participen del cáliz, que sería la Sangre del Señor ya consagrada.
Mientras el sacerdote toma el Sacramento, se inicia
el canto de Comunión, que debe expresar, por la unión de las voces, la unión espiritual
de quienes comulgan.
Para terminar la súplica del pueblo de Dios y
también para concluir todo el rito de la Comunión, el sacerdote dice la oración
después de la Comunión, en la que se suplican los frutos del misterio
celebrado.
RITO DE
CONCLUSIÓN
Al rito de conclusión pertenecen:
a) Breves avisos, si fuere necesario.
b) la bendición del sacerdote.
c) La despedida del pueblo, por parte del diácono o
del sacerdote, para que cada uno regrese a su bien obrar, alabando y
bendiciendo a Dios.
d) El beso del altar por parte del sacerdote y del diácono y después
la inclinación profunda al altar de parte del sacerdote, del diácono y de los
demás ministros.
BIBLIOGRAFÍA
ESQUEMA- 35 PALABRAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario